31jul04
La presencia de Salvatore Mancuso ante el Parlamento colombiano marca un hito en el control de un Estado por parte del crimen organizado.
Escucha este documento en Radio Nizkor
La historia del crimen organizado tiene capítulos que, en muchos casos han terminado superando a los mejores guionistas de cine.
El 28 de julio de 2004 tuvo lugar uno de esos hechos que bien pueden ser parte de un guión cinematográfico, pero que también son parte de la historia universal de la infamia.
Ese día en el parlamento colombiano ocuparon lugar preferente tres jefes paramilitares -acusados formalmente por la justicia como capos del narcotráfico- y leyeron sus discursos para mayor oprobio de las libertades civiles, la justicia y el poder popular del que es expresión un parlamento.
Meyer Lansky, capo mafioso y gran estratega financiero que trató inútilmente de ser enterrado en la colina de los héroes en Israel y que financió, entre otras muchas operaciones, la fracasada invasión de Bahía Cochinos, se sentiría orgulloso de la escena; escena, por otra parte, digna de su actuación en la Cuba de Fulgencio Batista.
Lo mismo podría ocurrir con el general Khun Sa en Birmania, quien, en la década de los años 80, llegó a controlar el 80 por ciento del territorio del Triángulo de Oro y logró elevar la producción de opio de 550 a 2.500 Toneladas métricas.
Evoca la imagen del presidente Reagan llamando "combatiente por la libertad" al líder talibán, Bin Laden.
Bin Laden organizó el mayor mercado de producción de opio del mundo para financiar la guerra contra los rusos en Afganistán. Hoy se le acusa de dirigir la mayor organización del integrismo islámico, la cual continúa financiándose con la heroína originada en Afganistán.
Igualmente, la imagen paramilitar en el Parlamento colombiano, no puede sino traernos a la mente al mismísimo y mítico capo siciliano Charles "Lucky" Luciano, que murió de un infarto en el aeropuerto de Nápoles en 1962, tras haber vivido en la semi clandestinidad durante años y organizar y dirigir una de las primeras redes sicilianas de heroína. Esto le fue permitido como pago a sus servicios durante la II Guerra Mundial.
La esperpéntica escena evoca también a los capos de la mafia corsa, los cuales tuvieron que retirarse del triángulo de oro y que, después del acuerdo del presidente Nixon con el presidente francés George Pompidou para terminar con los laboratorios de Marsella, fueron perseguidos.
Muchos de ellos fueron asesinados sin piedad, a pesar de su colaboración en la Conchinchina francesa y luego con la CIA en Vietnam del Sur.
Un espectáculo como el promovido en el parlamento colombiano es comparable asimismo con lo acaecido en Bolivia a partir de 1978, cuando empezaron a llegar a este país los primeros mercenarios extranjeros reclutados por el criminal de guerra alemán Klaus Barbie por cuenta del Ministerio del Interior boliviano, del que el nazi refugiado en Bolivia era asesor.
Así llegaron a Bolivia los argentinos Alfredo Mario Mingolla, González Bonorino y Silva, todos ellos procedentes de la tenebrosa Alianza Anticomunista Argentina o Triple A y así es como la Marina argentina se hizo con el control del mercado de la cocaína para la financiación de la guerra en Centroamérica y, especialmente, de sus operaciones en Guatemala primero, y en Honduras después.
Allí organizaron, entre otras muchas operaciones clandestinas, a un grupo de periodistas, dirigido por el colaborador de la Marina argentina, Juan Gasparini. Este grupo mantenía el control de la información y promovía operaciones de imagen a favor de los narcotraficantes.
Esta técnica ha sido utilizada en las campañas de imagen llevadas adelante por Carlos Castaño en Colombia y que incluyó la edición masiva de un libro titulado "Mi confesión". Este libro lo escribió el español Mauricio Aranguren Molina y lo publicitó la corresponsal del diario español El Mundo, Salud Hernández Mora.
Alvaro Uribe Vélez, presidente de Colombia, y su vicepresidente, Pacho Santos, son los máximos responsables de la mayor operación de legitimación de una organización criminal mafiosa que se ha dado en los últimos años.
Para que se comprenda el sentido exacto de lo que decimos, he aquí el perfil de cinco de los negociadores de las denominadas Autodefensas Unidas de Colombia. Sobre ellos penden en todos los casos acusaciones formales de dirigir organizaciones de narcotraficantes.
Estas organizaciones son responsables de la producción de más del 90 por ciento de la cocaína que se vende en el mundo.
Son responsables también del 65 por ciento de la heroína que llega a los Estados Unidos
En este momento el más importante es el jefe paramilitar Salvatore Mancuso.
Mancuso es integrante de la 'Ndranghetá', la poderosa mafia calabresa que ,según la Policía italiana, superó en fuerza y dimensiones a la cosa nostra siciliana. La 'Ndranghetá compró virtualmente "un barrio entero" en Bruselas, la capital de Bélgica, con dinero reciclado proveniente del narcotráfico.
La noticia la anunció el 5 de mayo de 2004 el Gobierno de Italia tras un operativo que arrojó como resultado el desmantelamiento de una importante red de narcotraficantes de la mafia calabresa, con ramificaciones internacionales.
En el operativo fueron arrestadas 47 personas acusadas de tráfico de droga y de lavado de dinero, a las que se les atribuye haber reciclado en Bruselas el equivalente a 28 millones de euros mediante la compra de inmuebles.
El juez investigador de Regio Calabria, Francesca Mollaca, anticipó que ya se habían iniciado los trámites para embargar lo que el grupo mafioso adquirió en la ciudad de Bruselas.
La actividad de la 'ndrangheta, de acuerdo a la investigación, se extiende también a Holanda, donde habrían comerciado grandes cantidades de heroína y cocaína.
Según una investigación de la Comisión Antimafia del Parlamento italiano, la 'ndranghetá' calabresa recauda unos 11.000 millones de dólares anuales solamente con el tráfico de cocaína, superando ampliamente los 9.000 millones de la cosa nostra siciliana.
La mafia calabresa domina además el mercado mundial del tráfico de cocaína con sus socios, los narcotraficantes colombianos. Abastece incluso a la misma cosa nostra, a la camorra napolitana y a la sacra corona unida de Puglia, las otras organizaciones mafiosas que existen en Italia.
También fue arrestado en Madrid, España un importante jefe de la 'ndranghetá', Antonino Pangallo, que desde el año 2002 estaba prófugo.
En sólo una semana, entre el 18 y el 24 de febrero de 2004, la Policía italiana arrestó a dos importantes capos: Giuseppe Morabito, 12 años prófugo, y Orazio De Stefano, buscado desde hacía 16 años.
El ministro italiano del Interior, Giuseppe Pisanu, definió a la 'ndrangheta como "la organización criminal más poderosa y peligrosa de Italia".
La organización, de acuerdo a las investigaciones, se ha expandido a países de los cinco continentes.
Los vínculos de las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, con las actividades del tráfico de estupefacientes fueron confirmados con la captura de 102 personas en Italia, Holanda y la ciudad colombiana de Santa Marta, pertenecientes a una red de narcotraficantes al servicio del grupo armado ilegal.
Con la operación antidrogas fue desmantelada una banda internacional liderada por la mafia 'Ndrangheta', una de las organizaciones criminales más peligrosas de Italia, y que, al parecer, tendría nexos con uno de los jefes del grupo paramilitar, precisaron las autoridades.
En la gigantesca acción policial, denominada 'Decollo', fueron detenidas 75 personas en Italia, 11 en Holanda y 16 en Colombia, y se incautaron más de 5.000 kilos de cocaína en la ciudad italiana de Calabria.
De acuerdo con las investigaciones, para desmantelar la red fue infiltrada una persona cercana a la familia Mancuso, de la localidad calabresa de Vibo Valentia, quien se relacionó con uno de sus parientes, actualmente líder del grupo paramilitar.
Según el procurador nacional Antimafia, Pierluigi Vigna, "con la operación antidrogas se demuestra que el tráfico de cocaína sirve para financiar formas de terrorismo. Un calabrés forma parte de las formaciones paramilitares colombianas".
Otro líder paramilitar es Víctor Manuel Mejía Múnera, uno de los llamados 'Mellizos'.
Él y su hermano, Miguel Ángel Melchor Mejía, 'El Loco', son señalados miembros del cartel del Norte del Valle. Además de pesar sobre ellos una solicitud de extradición bajo cargos de narcotráfico, tienen el dudoso honor de estar en la lista de los 12 narcotraficantes más buscados del mundo por el FBI.
'Los Mellizos son recordados por el multimillonario decomiso que la Policía hizo en agosto del 2001, en uno de sus apartamentos en Bogotá: 35 millones de dólares, 93 mil millones de pesos colombianos, camuflados en una de las paredes del apartamento 1102 de la carrera 6 No 88-44, en el norte de Bogotá.
De otro de los líderes paramilitar, Francisco Javier Zuloaga, las autoridades dicen que era uno de los socios de Fabio Ochoa Vásquez. Un tribunal del Distrito sur de Florida, le acusa de distribución de narcóticos, y ha pedido su extradición.
El 11 de junio de 2004, justo antes de que los jefes 'paras' empezaran a concentrarse en Santa Fe de Ralito, las autoridades desplegaron una operación con helicópteros, en El Volador, municipio de Valencia, para capturarlo.
Esa zona está bajo control de 'Adolfo Paz,' coordinador militar de las AUC para la zona de negociación.
La cercanía de la operación a la zona establecida para la concentración, generó protestas de las autodefensas y la aclaración del Gobierno de que se trataba de una acción contra narcotraficantes.
La presencia de 'Pablo Mejía' y de 'Gabriel Giraldo' en la zona de concentración fue confirmada por el Alto Comisionado, Luis Carlos Restrepo.
"Sí. 'Pablo Mejía' está desde la primera reunión que hicimos con el Bloque Central Bolívar y fue presentado como comandante del Vencedores de Arauca.
Ambos bloques se presentaron unidos", dijo el comisionado.
Agregó que 'Gabriel Galindo' siempre ha estado en las reuniones "acompañando" al señor 'Adolfo Paz': "El señor 'Adolfo Paz' y varios documentos lo presentan como comandante político del Bloque Pacífico".
"Ambos están en la zona y participan en la reunión que yo hago con ellos".
Otros de los líderes del narcotráfico colombiano son Diego Murillo, conocido como "Don Berna", y Vicente Castaño, quienes forman parte del estado mayor de las Autodefensas Unidas de Colombia.
Diego Murillo y Vicente Castaño, hermano del presuntamente desaparecido Carlos Castaño, están entre el grupo de negociadores que participan de las conversaciones de paz.
Después de que fueran acusados formalmente en Estados Unidos, estos dos jefes paramilitares pueden ser pedidos en extradición en cualquier momento por el tribunal estadounidense.
Los cargos contra ellos en la jurisdicción norteamericana van desde el suministro de insumos para la producción de cocaína, hasta conspiración para traficar cocaína a Estados Unidos.
El embajador de Estados Unidos en Bogotá acusa a las AUC de tratar de imponer lo que califica como "una agenda narcoterrorista" en las negociaciones de paz.
La acusación de narcotráfico por parte de los tribunales federales norteamericanos se produjo una semana antes de que varios jefes paramilitares comparecieran ante el Congreso colombiano para exponer sus puntos de vista sobre el conflicto armado en el país.
La carta del candidato demócrata John Kerry y 22 senadores, dirigida al Presidente Uribe Vélez el pasado 26 de julio, justo un día antes del espectáculo paramilitar en el Congreso colombiano, fue una forma muy clara de tomar distancia de la actual política del Departamento de Estado para Colombia.
Es impensable que sin el apoyo de la CIA y del Departamento de Estado el Gobierno de Uribe Vélez haya podido llevar hasta un punto sin retorno la relación entre la política y el crimen organizado.
En este contexto, resulta vergonzosa la posición de los ex presidentes españoles que visitaron Bogotá en claro apoyo a la presidencia de Uribe Vélez.
Se trata de los ex presidentes Felipe González, quien gobernó España durante 14 años, desde 1982 hasta 1996 y de José María Aznar, al frente del ejecutivo español durante 8 años y que acaba de perder sus primeras elecciones.
Felipe González apoyó a Uribe Vélez desde la época en que era Gobernador del Departamento de Antioquia, y se hizo famoso por su incondicional apoyo al ex embajador colombiano ante la Unión Europea, Carlos Arturo Marulanda.
Carlos Arturo Marulanda protagonizó un escándalo al que puso fin su detención en Madrid y ulterior extradición a Colombia acusado por la matanza llevada a cabo por paramilitares en la finca Bellacruz.
Esta hacienda era propiedad de la familia Marulanda y fue el lugar donde Salvatore Mancuso realizó su primera operación paramilitar conocida, exterminando a pequeños campesinos y quemando numerosas viviendas, según dio por probada la propia justicia colombiana.
En cambio, el presidente Aznar, vio en Uribe Vélez el candidato ideal para su política de estado de excepción, política que intentó llevar adelante en España y en la que coincide ideológicamente con los integristas que forman el núcleo duro del Gobierno Bush.
Promovió el único apoyo europeo a la política de Uribe Vélez, mediante la organización de sendos seminarios realizados justo al final de su mandato.
Para los mismos obtuvo el apoyo de la ex europarlamentaria y dirigente socialista, Paca Sauquillo, y el soporte financiero de la Fundación Ford.
Francisca Sauquillo no integró, por primera vez en muchos años, la lista de europarlamentarios y no tiene actualmente ningún puesto conocido en el nuevo Gobierno español, ni en la dirección del PSOE.
Aznar llevó su apoyo hasta el extremo de producir la primera venta de armas pesadas tácticas del Estado Español desde la época colonial.
La operación de venta de tanques de guerra fue anulada oficialmente por el actual Gobierno español, después de que la Comisión de Exteriores del Parlamento se expidiera en contra de la misma.
Pero no se produjo ninguna declaración condenando el crimen organizado y todo hace pensar la política exterior española mantendrá la continuidad y seguirá las directrices que ha usado tradicionalmente desde la época del primer Gobierno de Felipe González.
Radio Nizkor y Equipo Nizkor, 31jul04
